La fábrica de Tesla en Valencia que nunca existió

Imagen de la campaña ‘Spain loves Tesla’ que pretende una fábrica española

No se contempla una fábrica española pese al revuelo en redes sociales

El romance entre Valencia y Tesla tiene todas las características de ser un amor no correspondido. El fabricante de coches eléctricos nunca tuvo planes para construir una fábrica en Valencia. Y sigue sin tenerlos a pesar de que un grupo de españoles lanzaran a través de Internet en una iniciativa que se había convertido rápidamente en viral y que había incluso convertido#SpainLovesTesla en ‘trending topic’ en la red social Twitter.

La iniciativa había provocado una respuesta de Elon Musk, el cofundador, consejero delegado y principal accionista de la empresa, que replicó el jueves en Twitter diciendo, en español,“también te amo”. Algunos interpretaron esas tres palabras, que iban con copia a la cuenta oficial de Tesla (que tiene casi 4 millones de seguidores) y a la de Club Tesla España, como un “respaldo” oficioso del hombre que ha creado la empresa y que se identifica con ella de una manera similar a como le pasaba a Steve Jobs y Apple, o a Bill Gates y Microsoft – o, hace más tiempo, John D. Rockefeller con Standard Oil o John Pierpoint Morgan con JP Morgan -. Pero, en realidad, el amor de Musk por España se queda en el corazón, y no llega a la cartera. De hecho, Tesla no planea fabricar coches ni en Valencia, ni en España, ni en Europa, ni en ningún sitio fuera de Estados Unidos.

El Tesla Model S es el buque insignia en ventas de la compañía  EM

O sea, que la iniciativa, que cuenta con20.000 firmas de apoyo en la webChange.org, y que ha hecho que numerosos españoles hayan enviado por correo postal cartas a la sede de Tesla, en Palo Alto – donde están también Apple y Hewlett-Packard – pidiendo a Musk que construya una fábrica en Valencia van a tener el mismo efecto que las cartas a los Reyes Magos de Oriente.

Así lo declaró un portavoz de la compañía californiana a EL MUNDO el sábado. “No tenemos planes para construir una fábrica en Europa. Sin embargo, siempre hemos dicho que tendría sentido en algún momento construir una planta en Europa para abastecer la demanda de esa región”.

La única planta de fabricación de coches de Tesla está en Fremont, en California. En 2014, Musk declaró que Tesla empezaría a fabricar coches fuera de Estados Unidos, en Asia y en Europa, cuando su producción anual alcanzara el medio millón de unidades. Pero aquel año, solo salieron de la cadena de montaje 35.000 unidades. En el primer trimestre de 2016, Tesla ha producido 14.810 vehículos, frente a un objetivo de 18.000, y espera llegar a 17.000 en el periodo abril-junio. Su objetivo para este año es fabricar entre 80.000 y 90.000 vehículos.

En teoría, Tesla iba a alcanzar la barrera del medio millón de coches fabricados al año en 2020. Pero hace apenas dos semanas, Musk adelantó esa fecha a 2018, en buena medida por la demanda del nuevo vehículo de la empresa, el ‘Modelo 3’, que fue lanzado en marzo y que ha superado las expectativas más optimistas.

Pero esos planes de crecimiento están siendo cuestionados por Wall Street, en particular desde que Musk anunciara a principios de mes que va a necesitar 1.500 millones de dólares (1.325 millones de euros) para mantener sus planes de expansión, y a medida que grandes fabricantes de coches -como General Motors y BMW -, y de empresas tecnológicas – como Google y Apple – entran en el sector de la automoción. A eso se suma una inversión de 5.000 millones de dólares (4.400 millones de euros) en una inmensa fábrica de producción de baterías para el ‘Modelo 3’ que Tesla está construyendo en el desierto de Nevada y que funcionará con energía renovable.

En 2015, Tesla facturó 4.040 millones de dólares (3.570 millones de euros) y tuvo unas pérdidas de 888 millones de dólares(785 millones de euros). La empresa no ha dado beneficios nunca desde su creación, y el mercado no cree que vaya a conseguir sus objetivos de producción para 2018 o 2020. La empresa de Musk tiene una fama extraordinaria en innovación, y pésima en ejecución o, como ha resumido la gestora de fondos Oppenheimer ha declarado hace poco, Tesla “tiene un largo historial de objetivos casi inalcanzables”. Eso hace que la acción de Tesla sea muy volátil. Su valor en bolsa ha caído un 22% en bolsa desde principios de abril.

Elon Musk, ante el recientemente presentado Tesla Model 3  EM

Los otros frentes abiertos de Musk: SolarCity y SpaceX

Pero los coches no son la única industria que Musk está revolucionando. El empresario, que cumple 45 años el mes que viene, presiden SolarCity, una empresa de generación de electricidad por paneles solares cuya viabilidad está siendo cuestionada por Wall Street – donde sus títulos han caído un 82% en lo que va de año – por la misma razón que Tesla es criticada: su necesidad masiva de capital y sus pérdidas constantes.

Más éxito ha tenido con SpaceX, una empresa que fabrica cohetes espaciales y gestiona su lanzamiento y operaciones, y que ha ganado varios contratos con la NASA y, a partir de esta semana, con el Departamento de Defensa de EEUU. Para lograr este último contrato, Space Xe ha tenido que recurrir a los tribunales para romper el monopolio de United Launch Alliance (ULA), una empresa conjunta de Boeing y Lockheed Martin que cobraba al Pentágono el triple por los lanzamientos de cohetes que lo que cobra la compañía de Musk. Tesla, SolarCity y SpaceX generan en conjunto alrededor de 30.000 empleos directos, la práctica totalidad de ellos en EEUU.

Musk nació en Sudáfrica, pero se fue en la adolescencia a estudiar Físicas a Canadá. Su mayor éxito empresarial fue la empresa de medios de pago online PayPal. Su fortuna ha sido estimada en 9.500 millones de dólares (8.400 millones de euros). Solo en el último año, el patrimonio de Musk ha caído en 2.300 millones por la pérdida de valor de SolarCity y la volatilidad de Tesla

Publicado por el Mundo.