Heineken y La Sucursal invertirán 5,5 millones en el centro cultural y gastronómico del Veles e Vents

OLIVIA FONTANILLO

Heineken España y el grupo hostelero valenciano La Sucursal prevén invertir 5,5 millones de euros en los próximos siete años en la adecuación y funcionamiento de un centro dedicado a la cultura, la gastronomía y la formación en uno de los edificios más emblemáticos de Valencia, el ‘Veles e Vents’, construido para la Copa América. Este proyecto, que se espera que esté operativo en el primer semestre de 2016, supone un importante paso adelante en la dinamización de la zona del Puerto de Valencia, junto a la puesta en funcionamiento de la Marina de Empresas, promovida por Juan Roig, para lo que aunará “el tejido productivo primario, la industria agroalimentaria, el sector hostelero y el sector turístico”, subrayaron los gestores durante la presentación del proyecto.

Heineken y La Sucursal lograron la gestión del edificio en un concurso público, que valoró tanto su oferta de contenidos como la económica: pagarán un canon mensual es de 30.000 euros más IVA y la inversión prevista en obras, decoración y mobiliario asciende a 1,76 millones de euros, a los que se sumarán los costes por operativa y mantenimiento. El plazo inicial del contrato es de siete años, que se podrán prorrogar, de mutuo acuerdo, por periodos anuales.

Jorge Paradela, director de Relaciones Corporativas de Heineken España, indicó que el proyecto busca “satisfacer demandas reales de la sociedad y movilizar recursos locales, para lo que se apoyará en sectores estratégicos de la economía local y regional, generando refuerzos entre ellos, propiciando el nacimiento de nuevos productos y servicios, creando valor añadido y facilitando el establecimiento de relaciones de colaboración entre el sector público y el sector privado”.

Alianza con Mundo Sentidos

La propuesta cultural tiene como eje la cultura contemporánea y se centra en tres campos, artes plásticas, escénicas y eventos, y estará gestionada por la firma especializada Mundo Sentidos. Se ubicará principalmente en la planta de acceso al edificio, en un espacio de cerca de 1.000 metros cuadrados, y quiere convertirse en un espacio de referencia en la ciudad, en permanente transformación, que apoye la creatividad y los valores emergentes. Muchas de las propuestas que se plantean, y que dotarán de actividad al edificio, serán gratuitas.

En el terreno de las artes plásticas se instalará un ‘videowall’ en el hall del edificio, que será una de las propuestas principales de la oferta de artes plásticas. La fotografía, la escultura o el arte de las nuevas tecnologías (new media art) tendrán un protagonismo destacado, con seis exposiciones anuales y diversos eventos todos los meses. Acogerá, además, un festival anual de fotografía, asociado a otras propuestas de renombre en el sector.

Las artes escénicas también tendrán gran relevancia en la oferta cultural, con conciertos, teatro, danza y actividades infantiles o conceptos novedosos como el microteatro. Además, el edificio acogerá un club de jazz, con la colaboración de Berklee College of Music, Sedajazz y artistas reconocidos, así como acuerdos con empresas internacionales de producción de eventos musicales en directo.

El edificio albergará semanalmente talleres, jornadas, seminarios, presentaciones de libros y discos, espacios de emprendedurismo cultural, entre otros eventos culturales.

Restauración “para todos”

La parte gastronómica es una de las grandes apuestas del proyecto, por lo que se instalarán en el edifico tres espacios gastronómicos, diferentes pero complementarios, para todos los públicos. En la planta de acceso al Veles e Vents, tendrá cabida un restaurante centrado en la cocina mediterránea: arroces, pescados cocinados a las brasas y otros productos de la tierra son la esencia de un local con un amplio horario de apertura.

En la planta primera, se ubicará un espacio informal, con horario continuado de cocina, abierto desde el desayuno hasta la cena, que quiere convertirse en un punto de encuentro en el conviva el ocio con el intercambio de ideas, el diálogo y la creatividad. Finalmente, en la planta tercera se instalará un restaurante con una cocina de autor y creativa, de la mano del cocinero reconocido con una estrella Michelin Jorge de Andrés.

En los tres espacios, las zonas al aire libre tendrán un papel destacado con terrazas, que concentrarán buena parte de su oferta.

Escuela de gastronomía

Además, el edificio acogerá la sede de la Escuela de Hostelería de la Fundación Cruzcampo en Valencia, que formará, durante el curso académico, a 50 alumnos, y el proyecto Gastrolab, dedicado a la investigación y la divulgación de la cultura gastronómica.

Además, acogerá el primer Grado en Ciencias Gastronómicas de una universidad pública en España, que será impartido por la Universitat de València.

Publicado por el Economista.