Iglesias, a cuchillo contra Cabify tras mencionar su chalé: “Vuestro problema es con la ley y la democracia”

Podemos responde a la carta enviada el pasado viernes por el CEO de la empresa de transporte, Juan de Antonio

Juan de Antonio, CEO de Cabify (segundo por la derecha)

Juan de Antonio, CEO de Cabify (segundo por la derecha)EUROPA PRESS

Podemos continúa la escalada de tensión con Cabify, compañía que el pasado viernes decidió subir un peldaño su enfrentamiento con el partido morado y atacar directamente a su líder, Pablo Iglesias, recordando su chalé en Galapagar. “Yo no vivo ni en San Francisco ni en Galapagar”, le dijo en una carta pública el CEO de la empresa de VTC, Juan de Antonio. Esta carta fue hecha pública por Cabify el mismo día en que la compañía y el partido se enfrentaban en un acto de conciliación por derecho al honor en los juzgados de Plaza de Castilla en Madrid. Los ataques a Iglesias fueron personales. Ahora, el líder ‘morado’ se toma venganza y parece ‘picado’ con su respuesta a la empresa competidora de los taxis.

En un ataque ‘a cuchillo’ contra la empresa relacionada con Seaya Ventures, fondo de Beatriz González, hija del presidente de BBVA, Francisco González, el partido de izquierdas utiliza el modelo de publicidad lanzado por Cabify hace unos meses y el mismo formato de carta con el que la empresa madrileña obsequió a Podemos: “Hola Juan, Hola Cabify”, comienzan la carta de respuesta a la enviada por la empresa este viernes, y en la cual realizan acusaciones como “el problema de tu empresa no es con Podemos, Juan: es con la ley, con la democracia y con la soberanía popular”.”Gobernamos las principales ciudades de España y conocemos bien la problemática que ha generado tu compañía” -continua la epístola- “Nos preocupa la precariedad laboral que denuncian muchos de tus empleados. Nos preocupa que se vea amenazada la continuidad de un sector público tan importante como es el taxi”.

“No nos importa donde vives, sino que tu empresa pague los impuestos que le corresponden”

También le ha echado en cara la formación que “nos preocupa que Cabify esté haciendo todo lo posible para que no se cumpla la normativa que aprobó el Congreso de los Diputados y que limita las licencias VTC a una por cada 30 de taxi, en riesgo por vuestras prácticas poco honestas”.Y culmina con un ataque a De Antonio en la línea que el que el directivo madrileño le propinó a Iglesias: “No nos importa donde vives Juan, nos importa que tu empresa pague los impuestos que le corresponden en nuestro país”.
El viraje de Podemos con “las multinacionales”Cabify ha decidido seguir adelante con un enfrentamiento judicial contra Podemos por haber realizado supuestas declaraciones calumniosas y que atentan contra su derecho al honor. La pertinencia de mantener estas acciones legales ha sido muy debatida en la compañía, debido al posible efecto multiplicador que podría tener. Sin embargo, la empresa considera más importante que todo, incluso que su buena relación con Podemos, que quede claro que su estructura fiscal paga impuestos en España.El enfrentamiento viene de largo pues ya en junio de 2016, hace exactamente dos años, Cabify se reunió en secreto con la entonces pujante formación de izquierdas para intentar salir de su radar y combatir sus acusaciones de que “no paga impuestos”, algo que no han conseguido.Por su parte, desde Podemos se presentaron por primera vez ante la problemática de las licencias VTC con una posición ambigua. Como nuevo partido, había voces que los invitaban a posicionarse a favor de las plataformas tecnológicas. Sin embargo, tras conocer de primera mano la problemática del sector y reunirse con miembros del colectivo taxista la formación morada aclaró su posición y se definió muy en contra de las corporaciones “con sede fiscal en Delaware”. Ya en las elecciones de 2015, miembros prominentes del partido como Rafa Mayoral o Ramón Espinarrealizaron actos de campaña a favor del taxi

En un ataque ‘a cuchillo’ contra la empresa relacionada con Seaya Ventures, fondo de Beatriz González, hija del presidente de BBVA, Francisco González, el partido de izquierdas utiliza el modelo de publicidad lanzado por Cabify hace unos meses y el mismo formato de carta con el que la empresa madrileña obsequió a Podemos: “Hola Juan, Hola Cabify”, comienzan la carta de respuesta a la enviada por la empresa este viernes, y en la cual realizan acusaciones como “el problema de tu empresa no es con Podemos, Juan: es con la ley, con la democracia y con la soberanía popular”.”Gobernamos las principales ciudades de España y conocemos bien la problemática que ha generado tu compañía” -continua la epístola- “Nos preocupa la precariedad laboral que denuncian muchos de tus empleados. Nos preocupa que se vea amenazada la continuidad de un sector público tan importante como es el taxi”.

“No nos importa donde vives, sino que tu empresa pague los impuestos que le corresponden”

También le ha echado en cara la formación que “nos preocupa que Cabify esté haciendo todo lo posible para que no se cumpla la normativa que aprobó el Congreso de los Diputados y que limita las licencias VTC a una por cada 30 de taxi, en riesgo por vuestras prácticas poco honestas”.Y culmina con un ataque a De Antonio en la línea que el que el directivo madrileño le propinó a Iglesias: “No nos importa donde vives Juan, nos importa que tu empresa pague los impuestos que le corresponden en nuestro país”.
El viraje de Podemos con “las multinacionales”Cabify ha decidido seguir adelante con un enfrentamiento judicial contra Podemos por haber realizado supuestas declaraciones calumniosas y que atentan contra su derecho al honor. La pertinencia de mantener estas acciones legales ha sido muy debatida en la compañía, debido al posible efecto multiplicador que podría tener. Sin embargo, la empresa considera más importante que todo, incluso que su buena relación con Podemos, que quede claro que su estructura fiscal paga impuestos en España.El enfrentamiento viene de largo pues ya en junio de 2016, hace exactamente dos años, Cabify se reunió en secreto con la entonces pujante formación de izquierdas para intentar salir de su radar y combatir sus acusaciones de que “no paga impuestos”, algo que no han conseguido.Por su parte, desde Podemos se presentaron por primera vez ante la problemática de las licencias VTC con una posición ambigua. Como nuevo partido, había voces que los invitaban a posicionarse a favor de las plataformas tecnológicas. Sin embargo, tras conocer de primera mano la problemática del sector y reunirse con miembros del colectivo taxista la formación morada aclaró su posición y se definió muy en contra de las corporaciones “con sede fiscal en Delaware”. Ya en las elecciones de 2015, miembros prominentes del partido como Rafa Mayoral o Ramón Espinarrealizaron actos de campaña a favor del taxi

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Publicado por Vozpopuli.