MERIDA – La vicealcaldesa y delegada de Tráfico, Raquel Bravo, afirmó ayer que en estos momentos en los que el ayuntamiento “se puede permitir mirar a los ciudadanos” y bajar los impuestos por la mejora de la situación de las arcas públicas “no cabe una subida en las tarifas del taxi”. Bravo respondió así a los profesionales del sector, que a través de la asociación Radio Taxi han solicitado al consistorio un incremento de las tarifas para compensar la caída de actividad, que cifran en un 50% desde el inicio de la crisis.
“Que pongan trabas cuando queremos garantizar el empleo con nuevas licencias y ahora pidan un incremento en la tarifa es incongruente”, apuntó la delegada, que asegura que “si el Equipo de Gobierno tuviera que plantearse algo sobre este asunto, sería quizás una bajada de los precios”.