La tasa permitida es de 0,25 mg/l de aire expirado, y superarla conlleva una denuncia de 500 euros y la retira de entre 4 y 6 puntos. Además, rebasar una tasa de 0,60 mg/l de aire expirado está tipificada como delito contra la seguridad del tráfico, lo que implica la inmediata detención del conductor y puesta a disposición judicial
La DGT ha instalado 17 radares en la provincia de Valencia. Siete de ellos en la A-7 y tres en la A-3. Además, decenas de radares móviles se instalarán temporalmente en distintos puntos, tanto en carretera como en grandes avenidas de las principales ciudades de la Comunitat.
Según datos del Observatorio Europeo para la Seguridad Vial, alrededor del 25 por ciento de las muertes en carretera en Europa están relacionadas con el alcohol, mientras que aproximadamente el 1 por ciento del total de kilómetros recorridos son conducidos por personas con 0,5 g/l o más de alcohol en la sangre.
A medida que la concentración de alcohol en la sangre aumenta en el conductor, el índice de accidentes también se incrementa, y el aumento de la tasa de accidentes que se deriva de un aumento de la tasa de alcoholemia es progresivo.
Según estos datos del Obseravtorio, la tasa de accidente de un conductor con una tasa de alcoholemia de 0,8 g/l es 2,7 veces mayor que la de un conductor sobrio. Cuando un conductor tiene una tasa de alcoholemia de 1,5 g/l, se estima que su tasa de accidente es 22 veces mayor que la de un conductor sobrio.
No solo la tasa de accidentes aumenta rápidamente con el incremento de la de alcoholemia, sino que el accidente también se vuelve más grave. De este modo, con una tasa de alcoholemia de 1,5 g/l la tasa de accidentes de gravedad mortal es aproximadamente 200 veces mayor que cuando se trata de conductores que no han ingerido alcohol.
Así, cabe recordar que la tasa permitida es de 0,25 mg/l de aire expirado, y superarla conlleva una denuncia de 500 euros y la retira de entre 4 y 6 puntos. Además, rebasar una tasa de 0,60 mg/l de aire expirado está tipificada como delito contra la seguridad del tráfico, lo que implica la inmediata detención del conductor y puesta a disposición judicial.