Los ‘cazachoferes’ españoles que les enseñaron a los taxistas colombianos

El video que muestra un grupo de taxistas increpando a conductor y usuario de UberX no fue un episodio aislado, detrás hay una estrategia ‘amarilla’ que es transnacional.

 La asociación Élite Taxi se dedica a combatir en las calles lo que ellos califican como “servicios piratas”. Foto: BBC Mundo.

Los controles que quieren ejercer algunos taxistas al servicio de transporte Uber en Bogotá se están convirtiendo en una bomba de tiempo para las autoridades. El caso reciente es el de una usuaria y un conductor del servicio UberX retenidos y agredidos por varios taxistas. Eso encendió las alarmas entre la ciudadanía sobre los alcances que pueden tener estos retenes en la ciudad.
 
La grabación y la posterior publicación del video por parte de los propios taxistas no es ninguna casualidad. Se trata de una estrategia que emula prácticas implementadas por un grupo de taxistas españoles conocidos como Asociación Élite Taxi que, entre otras cosas, se dedica a combatir en las calles lo que ellos califican como “servicios piratas”.
 
Semana.com pudo establecer que la Asociación Élite Taxi de España tiene estrecha relación con grupos de taxistas en Bogotá. Agrupaciones que utilizan tácticas similares para denunciar y en algunos casos retener a conductores que prestan servicios de transporte individual mediante aplicaciones tecnológicas como Uber.
 
En exclusiva, Semana.com habló con Tito Álvarez, el fundador de Asociación Élite Taxi, quien reconoció que mediante un grupo de WhatsApp se comunica con taxistas en Bogotá. En este grupo, además de compartir información sobre el gremio, también coordinan acciones para enfrentar lo que ellos consideran una amenaza para su trabajo y el sustento a sus familias.
 
En la edición del 28 de marzo de este año, el diario El País de España reporta la forma como el grupo combate a los supuestos servicios de transporte pirata. “Nosotros salimos a trabajar. Pero cuando podemos, en los ratos muertos, cazamos choferes ilegales”, explicó José Luis Mata, un taxista español con 32 de experiencia que formó parte del dispositivo de control de taxis ilegales.
 
La similitud con los grupos que se mueven por Bogotá es innegable. El artículo también señala que el protocolo es claro. “No debe haber contacto físico con el sospechoso, se ha de consultar en la base de datos si tiene licencia VTC y si no aparece, se le pide que enseñe su autorización. Los legales lo hacen de inmediato”.
 
Álvarez rechazó tajantemente cualquier acto de violencia por parte de los taxistas y reprobó lo ocurrido en Bogotá el pasado fin de semana. Sin embargo, acepta que “el nerviosismo se puede tomar a los conductores”. Agregó que, en el caso del fin de semana en Bogotá, tanto la pasajera como el conductor de UberX infringieron la ley, pues los dos promovieron la piratería y eso no se puede aceptar.  
 
Estrategia transnacional
 
Álvarez es el abanderado de una lucha que ha tenido buenos resultados en España. Según él, gracias a las manifestaciones y las presiones que han ejercido sobre los supuestos conductores piratas se redujeron de 1.500 a 300 conductores que utilizan estas plataformas.

Las estrategias que utilizó Élite Taxi han sido replicadas en Francia, Reino Unido y poco a poco se están viendo en Brasil, Argentina y aparentemente en Colombia. Álvarez asegura, sin embargo, que la mejor estrategia es presionar al Gobierno y ganarle la batalla a Uber en los estrados judiciales.
 
Semana.com también habló con el presidente de la asociación de propietarios y conductores de taxis en Colombia, Hugo Ospina, que aseguró enfáticamente que “no tienen ningún tipo de relación con la Asociación Élite Taxi de España”. Sin embargo, reconoció que tiene conocimiento sobre algunos acercamientos entre este grupo y algunos taxistas. “El grupo debe ser muy cerrado”, aseguró.
 
¿Y las autoridades?

Ante tamaña problemática lo que se preguntan los ciudadanos preocupados es ¿dónde están los ministerios responsables de este tema? El Ministerio de Transporte, en cabeza de Natalia Abello, no tomó ninguna posición sobre el video del fin de semana. Mucho menos lo hizo el Ministerio de las TIC, que se ha caracterizado por obviar el tema de las plataformas de transporte.
 
Actualmente el Ministerio de Transporte, de acuerdo con lo dispuesto en el Plan Nacional de Desarrollo, continúa trabajando para emitir una reglamentación del servicio de lujo dentro de la modalidad individual de transporte de pasajeros, como lo ordena la Ley 1753 del 9 de junio del 2015, que establece un plazo de seis meses para la expedición de dicha normatividad.
 
Pero el tiempo apremia y la situación tiende a empeorar. Hugo Ospina hizo pública una carta que le envió al presidente Juan Manuel Santos en la que advierte que deben actuar lo antes posible, “antes de que haya una tragedia de grandes proporciones”. 

Publicado por Semana.