El Gobierno francés anunció hoy concesiones al gremio de taxistas para poner fin a una huelga que este colectivo había iniciado el pasado lunes y que bloqueó algunas grandes ciudades del país, en particular París.
El primer ministro, Jean-Marc Ayrault, anunció que congela de momento la concesión de licencias a los coches turísticos con conductor, una práctica creciente en el país que ha desencadenado la cólera de los taxistas, que lo consideran una competencia desleal.
La huelga, que se tradujo en ralentizaciones de tráfico en ejes de máxima circulación, fue convocada después de que la justicia francesa validara las licencias de los vehículos turísticos con conductor.
Para los taxistas, este tipo de transporte supone una competencia desleal, puesto que pagan por sus licencias apenas 100 euros, frente a los 200.000 que cuesta la de un taxi tradicional.
Consideran, además, que no están sujetos a la misma regulación y que no tienen que cumplir las mismas obligaciones, lo que les otorga ventajas a la hora de convencer a los clientes, a quienes pueden ofrecer precios menores.
Ayrault se dio dos meses para resolver el contencioso, periodo en el cual no se concederán nuevas licencias a estos vehículos turísticos.
El primer ministro nombró un mediador que debe “definir nuevas reglas del juego para una competencia equilibrada, en beneficio de los profesionales, los usuarios y el empleo”, indicó en un comunicado.
En ese periodo, agregó, se reforzará la vigilancia para que los vehículos turísticos no infrinjan las reglas.
Este tipo de transporte, inicialmente previsto para turistas pero que cada vez más parisienses utilizan, tiene prohibido usar los carriles destinados al transporte público, estacionar cerca de las estaciones férreas o los aeropuertos o tomar clientes que no hayan reservado previamente.
Los profesionales del taxi consideran que no cumplen estas limitaciones.
Nada más conocerse la decisión del Gobierno, los sindicatos de taxistas pidieron que se levantara la huelga
FUENTE: EFE