El taxi quiere ofrecer precios cerrados como Uber cuando el cliente contrate a través del móvil

El sector reclama al Consell una hora de espera para las VTC en cada servicio, como País Vasco y Baleares, para no dejar la decisión a los alcaldes

José Luis García 07.02.2019 | 21:26

Concentración de taxistas, en la calle Colón de València.

Concentración de taxistas, en la calle Colón de València. germán caballero

La crisis por la llegada de Uber y la competencia que esta plataforma y Cabify están realizando al taxi, no solo está llevando a este colectivo tradicional a exigir una regulación restrictiva para las licencias de alquiler de coche con conductor (VTC). El taxi también busca adaptarse a las nuevas demandas del mercado que, en medio de este debate entre el servicio clásico y las nuevas plataformas digitales, pide mejoras en un sector al que le ha costado tradicionalmente ir introduciendo cambios.

En este contexto, las organizaciones del taxi han reclamado a la Conselleria de Transporte poder ofrecer a los clientes precios cerrados cuando la contratación del vehículo se realice por vía telemática. Es decir, a través de las app como MyTaxi que llevan tiempo funcionando pero que, a diferencia de Uber o Cabify, no permiten conocer el coste del servicio antes de pedirlo ya que el taxi funciona con un sistema de tarifas.

Según explica Fernando del Molino, presidente de la Confederación de Autónomos del Taxi de la C. Valenciana, se trata de un debate que lleva años asentado en el sector. La última ley del taxi ya introdujo esta posibilidad, pero todo quedó pendiente de un desarrollo reglamentario que nunca se ha ejecutado. El pasado martes se le volvió a recordar a la conselleria.

La contratación vía móvil es una de las tres posibilidades que tiene un taxi (las otras son a mano alzada en la calle y en paradas habilitadas), pero es la única en la que compite con los gigantes tecnológicos.

La Generalitat valenciana acaba de lanzar un primer borrador del decreto que regulará la actividad de Uber o Cabify en la autonomía. Y en línea con lo aprobado por el Govern catalán, fija un tiempo de espera mínimo de 15 desde la petición de un Uber hasta la recogida, aunque da poderes a cada municipio para que amplíe esa franja horaria, como hará Barcelona.

Cuenta atrás electoral

En estos momentos, el taxi se debate sobre cómo proceder, un dilema ligado a los tiempos electorales. La cuestión es si acepta lo que ofrece la conselleria y se garantiza una restricción a las VTC antes de que se agote esta legislatura; o si mantiene la presión con movilizaciones con el riesgo de verse perjudicado si el nuevo Consell es menos favorable. Se da la circunstancia de que en València, donde ya operan Uber y Cabify, el ayuntamiento se ha mostrado claramente sensible a las demandas del taxi. Sin ir más lejos, ayer, el alcalde Joan Ribó insistió: «El taxi es un servicio público al que queremos dar la máxima protección sin que las nuevas plataformas invadan sus competencias».

Las organizaciones del taxi, sin embargo, no quieren dejar que la decisión dependa de cada municipio. Ciudades como Alicante o Benidorm, donde Uber prevé desembarcar, tienen otro signo político, y el taxi tiene muy presente la negativa del PP en Madrid a restringir la actividad de las VTC.

Así la cosas, su expectativa, al menos de momento, pasa por lograr del Consell una posición como la de País Vasco o Baleares, donde en todo el territorio autonómico se fija un mínimo de una hora entre la petición y la recogida del servicio.

Publicado por El Levante.